CAMBIOS EN MI RUTINA DURANTE LOS MESES DE VERANO

Como prometí en la entrada anterior, os voy a contar algunos de los cambios que realizo en mi rutina habitual en estos meses de verano.

En primer lugar, a partir del mes de abril más o menos, cuando empezó a hacer calor, me fui a por mi protector solar facial con spf 50. En estos meses y, para el rostro, no os aconsejo usar menos de spf 30. Lo que busco en un protector facial, aparte de que proteja de los rayos UVA y UVB (como ya vimos en la entrada anterior), es que no blanquee y que no me de grasa. Para esto, suelo buscar los que se denominan “protectores urbanos”. Este año estoy usando el de Khiel’s (Ultra Light Daily UV Defense) y he de decir que me está gustando muchísimo. 

Estoy a punto de terminarlo y ya tengo repuesto, me ha durado, usándolo a diario, unos dos meses y medio. Lo aplico sustituyendo a mi hidratante habitual y espero un buen rato para que la piel lo absorba bien antes de aplicar el maquillaje.

Para el cuerpo, me gusta mucho ISDIN (de venta en farmacias). Este año, en cambio, decidí probar el de La Roche-Posay pero no me ha convencido: blanquea muchísimo y la textura es muy densa, tarda muchísimo en absorberse y deja esa sensación aceitosa en la piel que no me gusta nada. En cuanto que se acabe, volveré a ISDIN. En la foto podéis ver también el aftersun de Isdin.

Otro básico para mí en verano es el aceite de Monoï. En Tahití, la principal isla de la Polinesia francesa, utilizan desde hace más de dos mil años para fines rituales y medicinales el Monoï, un extracto aceitoso con componentes naturales (flores de Tiaré y aceite de copra, que es la médula del coco). El Monoï tiene conocidas propiedades hidratantes, suavizantes y nutritivas sobre la piel y el cabello.

Proporciona una hidratación óptima y purifica a la vez que relaja nuestra piel. En los tiempos antiguos, los polinesios cubrían a sus bebés recién nacidos de pies a cabeza con este aceite para evitar la deshidratación. (Ya sabéis, es apto para bebés y niños).

Lo podemos utilizar antes y después de la exposición solar, pero recordemos que no tiene filtro solar, por lo que debemos usarlo combinado con un protector. Yo lo uso siempre al salir de la ducha, por las mañanas. Aparentemente, con el uso de este aceite tras la exposición solar, conseguiremos mantener el bronceado por más tiempo.

También tiene propiedades positivas para el cabello, ya que lo protege, suaviza e hidrata. Cuando voy a disfrutar de un día en la playa o en la piscina, aplico aceite de monoï en el cabello antes del baño y de la exposición solar. Si queréis usarlo como mascarilla prelavado utilizad poco producto y aplicad solo en largos y puntas (nunca en la raíz).

La calidad de este extracto fue reconocida en 1992 con la concesión de una Denominación de Origen por parte del Gobierno francés. El aceite de Monoï de Tahití debe contener al menos un 50% de Monoï de Tahití auténtico (cuidado con las falsificaciones provenientes, sobre todo, de Asia, el auténtico solo puede provenir de Tahití!)

Yo utilizo el de Les Polisianes de Klorane (otros también con muy buenas críticas son los de Hei Poa o Rhade Syam, un poco más difíciles de conseguir, aunque podéis preguntar en herbolarios). 

Efectivamente, el de Les Polisianes tiene un 50% de Monoï. Lo podéis encontrar en farmacias y no es muy caro (creo recordar que me cuesta alrededor de 12 euros).

También podéis utilizarlo en invierno porque sus propiedades hidratantes son muy efectivas, pero yo no lo hago por el inconveniente de que se solidifica a temperaturas por debajo de los 28ºC aproximadamente. Basta con dejarlo unos 30 segundos bajo el grifo con agua caliente, incluso hay gente que retira el tapón y lo mete en el microondas. Pero yo, que por las mañanas voy con prisa, la verdad es que no lo encuentro muy práctico y en cuanto que llega finales de septiembre abandono el Monoï hasta el año próximo…

El olor es especial y exótico. He leído a muchas chicas decir que les encanta, que es un olor maravilloso y que hay gente que incluso les pregunta qué fragancia han utilizado… Yo no lo veo para tanto. A mí ni me gusta ni me disgusta. Me resulta un aroma floral, exótico como decía antes, con un punto a coco, pero no muy marcado… Esto ya es bastante personal, pero para mí es un olor que evoca días de playa, recuerdos de veranos pasados, veranos de mi infancia particularmente.

Para más información sobre el aceite de esta firma, podéis visitar su página web oficial.

Aparte del aceite de Monoï, debido a que el envase es de vidrio (por cierto, en alguna parte leí que deberíamos desconfiar cuando no nos vendan el aceite de Monoï en envase de vidrio porque probablemente sea falso!) para llevar cuando voy a pasar el día fuera, suelo utilizar el aftersun que habéis visto más arriba.

Y ahora, vamos con el maquillaje.

Otra rutina que cambio siempre en los meses de verano es la de la base de maquillaje. En invierno, suelo utilizar base fluida, pero en verano me gusta más usar base en polvo o directamente una hidratante con color.

Como base en polvo, durante bastante tiempo he estado utilizando Halo Hydrating Perfecting Powder de Smashbox (polvos minerales) que me encantan (recordad que esta firma no se comercializa en España), pero este verano me he pasado a los Hello Flawless de Benefit. 

Esta base me da muy buen resultado también y, además, podemos conseguir más o menos cobertura dependiendo de la forma de aplicación. 

Como veis, en el envase (bajo los polvos) se incluye una brocha y una esponjita. Si lo aplicamos con la brocha, el resultado será más natural y, si buscamos más cobertura (por ejemplo para cubir granitos) podemos recurrir a la esponjita. (De todas maneras, yo siempre aplico estos polvos con la brocha 45 de Sephora). El tono que se aprecia en esta foto es el Honey. Como referencia, yo soy nc20-25 y ahora que he cogido algo de color, estoy empezando a usar este tono pero hace como un mes, utilizaba el tono Champagne. Otro punto positivo es que estos polvos tienen factor de protección solar y podemos reaplicarlos cada cierto tiempo fácilmente.

Cuando quiero un resultado muy muy natural y no quiero sentir ni siquiera la sensación de que voy maquillada, recurro a la hidratante con color. 

Utilizo la de Bobbi Brown que veis en la foto y no la cambio por ninguna! El tono que se aprecia en la foto es el Light to Medium (perfecto para mi tono). Como podéis ver, esta crema tiene spf15.

Por último, veis que en la foto de todos los productos aparecen polvos sueltos de la firma Nars. Aunque también los utilizo en invierno, los he incluido en esta recopilación porque en verano me parecen indispensables. Si utilizamos una base fluida (para algún evento, por la noche o simplemente porque preferimos este tipo de base) es importantísimo que la selléis con polvos (siempre es recomendable, pero en verano es indispensable). Incluso con la hidratante con color, a veces aplico un poco de polvos sueltos para matizar. Los que veis en la foto son los de Nars. Son unos polvos finísimos y muy naturales (no dejan ese aspecto empolvado tan antinatural). 

El tono de los de la foto es Eden. (Si alguna comprarais estos polvos sueltos, os aconsejo hacer como en la foto, levantando sólo un poquito la pegatina, dejando expuestos tres agujeros únicamente. De esta manera, la aplicación os resultará mucho más cómoda!).

Los polvos sueltos son un poco engorrosos, por lo que muchas personas prefieren usar polvos compactos (aunque el resultado que ofrecen los polvos sueltos me parece mucho mejor que el de los compactos). Este formato ofrece una aplicación mucho más cómoda que los polvos sueltos y son los idóneos para llevar siempre en el bolso e ir retocando durante el día (o la noche!). 

Los que veis en la foto son el tono Flesh de la firma Nars.

Y, por último, si sudáis mucho sería recomendable buscar maquillaje waterproof.

Bueno, pues esos son los cambios más significativos que realizo en mi rutina cuando llegan estos meses de verano.

Gracias por leerme y muchísimas gracias a las que me dejáis comentarios!

Un besote,

Material Girl